La arquitectura legal para una de las operaciones aéreas más ambiciosas de los últimos tiempos quedó finalmente completada. A escasas jornadas del vuelo inaugural, la Subsecretaría de Transporte Aéreo emitió el aval regulatorio definitivo que faculta a China Eastern Airlines para iniciar sus servicios regulares en el país.
Esta decisión administrativa, formalizada este miércoles mediante la publicación en el Boletín Oficial de la Disposición 42/2025, transforma en realidad operativa la planificación logística que la compañía asiática había adelantado meses atrás en sus sistemas globales de distribución.
Con fecha de inicio estipulada para el próximo 4 de diciembre, este servicio no es uno más en la pizarra de arribos de Ezeiza (EZE); representa un hito en la conectividad internacional al establecer el primer enlace comercial regular entre China y Argentina. El itinerario diseñado conecta el hub de Shanghai (PVG) con Buenos Aires, utilizando a Auckland (AKL), en Nueva Zelanda, como escala técnica y comercial imprescindible.
Despliegue operativo y marco jurídico
La normativa, refrendada por el subsecretario Hernán Adrián Gómez, certifica que el operador ha cumplimentado la totalidad de los requisitos administrativos y legales, contando además con el dictamen técnico favorable de la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC).
El instrumento legal se ampara en la política de cielos abiertos promovida por el Decreto 599/2024 y se sustenta en el Acuerdo de Servicios Aéreos bilateral vigente desde 2004. La autorización abarca la explotación de servicios regulares tanto de pasajeros como de carga en la ruta designada como "Puntos en China - Puntos Intermedios - Puntos en Argentina".
Desde una perspectiva técnica, la operación se llevará a cabo con aeronaves Boeing 777-300ER, configuradas para afrontar una travesía de proporciones colosales. El vuelo, identificado con el código MU 745, ostentará el título de la ruta comercial "directa" más larga del mundo.
En la terminología aeronáutica, la categoría de "vuelo directo" se mantiene aun existiendo una escala, siempre y cuando no se requiera cambio de aeronave ni de número de vuelo, condición que esta ruta cumple estrictamente.
Cronograma y oferta comercial
La logística del vuelo implica una duración total estimada de 25 horas y 30 minutos. El esquema de frecuencias contempla dos salidas semanales desde Shanghai: los lunes y jueves a las 02:00 (hora local). La aeronave tocará suelo neozelandés a las 18:30 para, tras una detención de dos horas, emprender el tramo final hacia Buenos Aires, con arribo previsto a las 16:30. El regreso mantendrá la misma triangulación vía Oceanía.
En el plano comercial, la venta de boletos ya se encuentra activa. El mercado ha validado tarifas de referencia que orbitan los 2.222 dólares por tramo en itinerarios de ida y vuelta, consolidando así una nueva puerta de entrada a Asia a través del Pacífico Sur, diversificando las opciones de conectividad para el mercado argentino.
La propuesta de China Eastern se posiciona, por diseño, como la opción más rápida del mercado. La escala técnica de solo dos horas en Auckland, sin cambio de avión, minimiza los tiempos muertos.
La Competencia vía Medio Oriente (Emirates/Qatar Airways)
Estas han sido tradicionalmente las opciones más eficientes. Sin embargo, un itinerario típico vía Dubái o Doha suele oscilar entre las 28 y 32 horas totales, dependiendo de la ventana de conexión. La necesidad de cambiar de aeronave y transitar por grandes terminales añade fricción al tiempo total.
La Ruta Europea (Lufthansa/KLM/Air France)
Conexiones vía Frankfurt, Ámsterdam o París suelen extenderse por encima de las 30 a 35 horas. La desviación geográfica hacia el hemisferio norte para luego descender hacia Asia penaliza la eficiencia en términos de horas de vuelo netas.
La ruta transpacífica ofrece una ganancia neta de entre 3 y 6 horas frente a sus competidores más cercanos, un activo invaluable para el viajero corporativo.
NA
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