Una joven de Rosario habría ofrecido su vientre a dos hombres italianos debido a su situación económica, lo que llevó a una investigación por posible trata de personas, venta de niños o apropiación de menores.
El viernes pasado, en el Aeropuerto de Ezeiza, dos hombres italianos, una mujer argentina de 28 años y una bebé de 15 días, listos para abordar un vuelo de Air France hacia París, fueron detenidos por una orden judicial que impedía su salida del país. Las sospechas surgieron cuando la mujer intentó autorizar a uno de los italianos a viajar solo con la beba. Las autoridades notaron su distancia con la recién nacida y con el hombre que decía ser su pareja.
Aunque los documentos estaban en regla, la joven vivía en un asentamiento en Rosario y el italiano solo había viajado una vez a Argentina en agosto de 2023, lo que sugería un tratamiento de fertilidad. Migraciones alertó al Juzgado Federal N°1 de Lomas de Zamora, y el juez Federico Villena ordenó una investigación penal por los posibles delitos mencionados.
La pareja intentó salir del país el viernes en un vuelo de Air Europa, pero al final optaron por Air France. Sin embargo, fueron detenidos antes de despegar debido a una alerta de Migraciones.
El sábado el programa de trata de personas del Ministerio de Justicia entrevistó a la mujer, quien inicialmente dijo que conoció a los italianos en un bar y quiso ayudarlos. Luego, admitió que fue contactada por intermediarios a través de Facebook, quienes le ofrecieron 10 millones de pesos y le hicieron firmar documentos que no comprendió del todo. A los seis meses de embarazo, recibió 6 millones de pesos, que planeaba usar para mejorar su vivienda.
Un funcionario comentó que la joven está en una situación de extrema vulnerabilidad, sin empleo, educación completa y criando sola a una hija. Esto refuerza la hipótesis de que no actuó por altruismo, sino por necesidad económica.
La investigación apunta a una empresa que habría contratado a la joven para gestar al bebé de la pareja italiana. Se sospecha que esta empresa, con conexiones en Estados Unidos, cobró a los italianos y pagó a la joven solo una fracción del total. La empresa también se encargó de los estudios médicos y el tratamiento en Rosario, y alquiló un departamento en Recoleta para la joven antes del parto en la Maternidad Suizo Argentina.
El juez Villena ordenó allanamientos y otras medidas. Se incautaron teléfonos de los supuestos padres de la niña, revelando que la empresa se comunicaba con la joven mediante mensajes temporales y realizaba pagos en efectivo, incluyendo la entrega de 6 millones en el bar Rock & Feller’s de Rosario.
La beba permanece bajo el cuidado de la pareja italiana, que alquiló un departamento en Buenos Aires cerca de la clínica. Este lunes los hombres se comprometieron a no sacar a la menor del país, según informó su abogado, Arnaldo Germán Pereira Dos Santos.
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