Tras siete meses de búsqueda, efectivos de la Policía Bonaerense lograron detener hoy a Gabriel Elías Gutiérrez, alias “El Churry”, un peligroso delincuente de 29 años acusado de ser el autor del homicidio de Rubén Oscar Arias, ocurrido en diciembre de 2024 en el barrio platense "El Mercadito".
El hecho, investigado y llevado a cabo por oficiales de la DDI La Plata (Subdelegación Ensenada), se produjo el 18 de diciembre de ese año, cuando Arias, de 59 años, fue alcanzado por un disparo en la cabeza en medio de un enfrentamiento armado entre grupos delictivos en la zona de calle 516 Bis entre 119 y 120.
La víctima se encontraba hablando con un vecino cuando recibió el impacto. Fue trasladado por el SAME al Hospital San Martín, donde falleció horas después debido a la gravedad de la herida.
El tiroteo involucró a sujetos conocidos en la zona como “Rusito”, “Chulo” y “Churry”, siendo este último sindicado como autor del disparo fatal. En febrero, se concretaron las detenciones de los dos primeros, pero Gutiérrez permanecía prófugo.
Luego de intensas tareas de inteligencia, la policía logró establecer que Gutiérrez se ocultaba en la zona costera de Punta Lara. Este martes, al detectarlo caminando por el murallón de La Pérgola (Av. Almirante Brown entre 132 y 133), intentó escapar hacia el río, pero fue reducido y finalmente detenido en la playa.
La causa está a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) número 11, a cargo del fiscal Álvaro Garganta, y el Juzgado de Garantías N°1, de Federico Atencio, ambos del Departamento Judicial La Plata.
El detenido enfrenta cargos por homicidio agravado, amenazas agravadas y portación ilegal de arma de fuego de uso civil.
Un prontuario extenso y violento
Gutiérrez, alias “El Churry”, cuenta con un extenso prontuario delictivo que incluye causas por tentativa de homicidio, privación ilegal de la libertad, tenencia de armas, robos calificados, amenazas y lesiones.
Asimismo, registra tres ingresos previos al sistema penitenciario bonaerense, con salidas en 2014, 2018 y 2019.Con su captura, se cierra una etapa clave en la investigación del crimen de Rubén Arias, aunque no se descarta que puedan surgir nuevas imputaciones a medida que avanza el expediente.
NA
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