Shannon Bozell es una mujer oriunda de Kalamazoo, en el estado de Michigan, en Estados Unidos y a sus 44 años pensó en someterse al microblading para arreglar sus cejas.
Fue en octubre de 2019 que Bozell decidió ir hasta la tienda de Anne Hicks a realizarse este tratamiento, pero con resultados lejos de los esperados. Así lo dio a conocer la propia mujer en su cuenta de Facebook, quien sólo hace unas semanas reveló la pesadilla que atraviesa.
“¡Me arruinó el rostro! Me he estado escondiendo desde entonces. Pasé de no tener nada de cejas (por habérmelas depilado en exceso cuando tenía 20) a tener las cejas más grandes y feas de Kalamazoo. La razón por la que hago esto público es porque la gente debe tener cuidado”, advirtió la mujer en redes sociales, declaraciones que consignó el New York Post.
En tanto, Hicks se defendió de las acusaciones, indicando que en todo momento le dijo a Bozell cómo sería el resultado, señalando también que lleva dos años ejerciendo esta labor con óptimos resultados.
Comentarios