Médicos de Estados Unidos advirtieron la importancia de atenderse con un especialista cuando uno sufre mordidas considerables durante el sexo.
La llamada la atención llegó desde Phoenix luego que un paciente llegó con un pene lastimado que se había puesto negro.
Según los reportes del Visual Journal of Emergency Medicine, un hombre llegó a la clínica en el estado de Arizona con una herida en su órgano sexual que había afectado a 3 centímetros de tejido.
El hombre, de 43 años, había sido mordido por su pareja en la punta del pene durante el sexo. Pero no pidió ayuda médica hasta 5 días después del pequeño incidente.
Para ese momento, el dolor había empeorado y la punta del pene se había puesto negra.
La punta del órgano, explicaron los médicos, estaba "necrótica". Esto significa la muerte de células y tejido y suele pasar en infecciones y heridas traumáticas, como son las mordidas.
Pero no había pus y los especialistas no confirmaron si la herida estaba infectada.
Aunque el paciente no precisó de cirugía, le suministraron antibióticos y lograron la "resolución completa" de la herida en una segunda cita un mes más tarde, según consignaron en el reporte.
"Los pacientes mordidos en el pene suelen no buscar atención médica inmediata y el proceso de la enfermedad suele avanzar", recalcó el doctor Marc Zosky, autor del informe.
El avance puede llevar comúnmente a "úlceras en la piel e infecciones", explicó. Es necesario en estos casos el tratamiento de las heridas y el uso de antibióticos, advirtió.
"En pocos casos, las mordidas pueden llevar a infecciones mortales como la llamada gangrena de Fournier que requiere cirugía inmediata", señaló Zosky.
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