El último show de Enrique Iglesias generó revuelo y críticas en las redes sociales. Ocurrió en durango, México, en donde el cantante abrazó a la bailarina Celia Chávez, le levantó la pollera y le tocó la cola
Un polémico episodio que el español protagonizo frente a cerca de 30.000 personas, que se han negado a aplaudir su comportamiento. Todo ocurría durante el sencillo que el hijo de Julio Iglesias creó junto a Romeo Santos. Mientras entonaba con emoción la letra, el artista se propasó con su compañera.
No fue el único momento en el que Iglesias no estuvo acertado, pues durante su show, el intérprete de Bailando se acercó a una admiradora del público, le sujetó la cabeza y le dio un beso en la boca. Una imagen que fue compartida por el propio Iglesias en su Instagram.
La polémica no acaba aquí y es que, además de criticar la acción, muchos de los asistentes han reclamado a la productora que devolvieran el dinero de su entrada, pues aseguraban que gran parte del concierto se escuchaba en playback.
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