Thiago es un brasileño, de 39 años, que vino a Argentina a estudiar medicina.
El hombre cursó un tiempo, pero el trabajo intenso hizo que abandonara la carrera.
Entusiasmado en Buenos Aires con amigos argentinos hizo que se dedicara plenamente al trabajo.
Hasta que un día todo se detuvo. Tuvo un problema renal y esto hizo que debiera trasplantarse.
Thiago creyó que el sistema de salud argentino no lo iba a considerar y se equivocó.
Entró en lista de espera del INCUCAI y fue trasplantado. Dice que tiene una secuencia de marcas.
La primera marca es de la fístula para dializarse y la otra es la del trasplante.
Esta marca le dio la oportunidad de vivir. Thiago dice que es un poco argentino, solo sabe que su donante era un chico de 27 años que tuvo un accidente de tránsito.
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