Portada  |  06 diciembre 2021

Un reconocido científico pronosticó cuándo se extinguirá la especia humana

El artículo de opinión titulado "los humanos están condenados a extinguirse" fue publicado por la revista Scientific American

Internacionales

La revista estadounidense Scientific American publicó en su edición web una nota de opinión escrita por el paleontólogo, biólogo evolutivo y editor del diario científico inglés Nature, Henry Gee, quien advierte que “los humanos están condenados a extinguirse”.

Gee habla de la degradación del hábitat al nivel de que hay menos recursos, del declive de la fertilidad, de la disminución de la tasa de natalidad por sobre la de mortalidad y de

“Sospecho que la población humana está destinada no solo a la contracción sino al colapso y pronto. Parafraseando a Lehrer [por el músico, Tom], si vamos a escribir sobre la extinción humana, será mejor que comencemos a escribir ahora”, asevera Gee.

El paleontólogo dice que “las señales ya están ahí para quienes deseen verlas” y enumera: “Cuando el hábitat se degrada de tal manera que hay menos recursos para todos, cuando la fertilidad empieza a declinar, cuando la tasa de natalidad desciende por debajo de la tasa de mortalidad y cuando los recursos genéticos son limitados, el único camino es hacia abajo”.

En ese sentido, desglosa cada uno de los conceptos. Explica en el artículo que aunque la población aumenta, esa tasa de incremento se redujo a la mitad desde 1968. También, que hay un consenso general en que la población alcanzará su punto máximo en algún momento de mediados de siglo y que luego comenzará a caer de forma drástica.

“Tan pronto como 2100, el tamaño de la población mundial podría ser menor de lo que es ahora. En la mayoría de los países, incluidos los más pobres, la tasa de natalidad está ahora muy por debajo de la tasa de mortalidad. En algunos países, la población pronto será la mitad del valor actual. La gente ahora está preocupada por la subpoblación”, plantea.

Además, plantea que en las últimas décadas disminuyó “enormemente” la calidad de los espermatozoides humanos, lo que posiblemente condujo a tasas de natalidad muy bajas por razones que aún intentan establecerse. “La contaminación, un subproducto de la degradación humana del medio ambiente, es un factor posible. Otro podría ser el estrés, que sugiero podría desencadenarse al vivir cerca de otras personas durante un período prolongado. En la mayor parte de la evolución humana la gente viajaba liviana por la tierra, en bandas dispersas. El hábito de vivir en las ciudades prácticamente uno encima del otro es un hábito muy reciente”, remarca Gee.

También considera que otra razón que puede influir en la desaceleración del crecimiento demográfico es la económica, que incluso postergaría la decisión de tener hijos.

“Un factor adicional en la reducción de la tasa de crecimiento de la población es algo que solo puede considerarse como del todo bienvenido y desde hace mucho tiempo: la emancipación económica, reproductiva y política de la mujer”, indica asimismo Gee, quien determina que esta transformación comenzó hace poco más de un siglo, pero que ya duplica la población activa y que mejoró tanto el nivel educativo, como la longevidad y el potencial económico de los seres humanos en general.

Comentarios