Amber Hoffman, de 24 años, cayó en la droga y terminó en la calle. Pesaba 42 kilos, era adicta a las metanfetaminas y a la heroína.
Tal es su consumo que termino con un agujero en el corazón. Hoy lleva "nueve meses limpia", fue operada y quiso contar su historia para generar consciencia. Para esto, subió a sus redes una foto de cuando su madre la sacó de las calles y cómo se encuentra hoy.
"A la izquierda: yo, completamente rota, 42 kilos, viviendo en las calles, viviendo con miedo, con dolor, adicta a la metanfetamina y la heroína, y preparada para que mi vida llegara a su fin. Tuve endocarditis dos veces por consumir y un agujero en el corazón. Mi madre me hizo esa foto cuando vino a rescatarme", narra en su post Amber.
Su "antes y después" se ha transformado en mensaje de esperanza para lo que enfrentan la adicción a las drogas.
Comentarios