*Por Bárbara García Crespo y Agustín Monguillot
Un grupo comando que tenía todo para hacer una especie de atraco de película, terminó de la manera más tonta. Habían logrado asaltar un camión blindado en Lomas del Mirador, llevarse más de 6 millones de pesos en sacas sin disparar ni un sólo tiro en menos de 12 segundos. La descripción es digna de un aplauso. Sin embargo, los delincuentes dejaron todas las huellas que pudieron y en menos de lo que esperaban, estaban todos presos.
Ocurrió el 8 de octubre del 2019 a las ocho y media de la mañana. Un camión blindado estacionó en la puerta del Banco Supervielle en Lomas del Mirador. Con un minucioso plan, cinco delincuentes lo esperaban al acecho. Uno, estaba ubicado en la fila de la parada de la línea 284, a metros del lugar. Otro, en la puerta de un kiosco. Otros dos, estaban en la fila de jubilados del banco y el último, estaba ubicado a unas cuadras, en un auto Fiat Palio que fue el que utilizaron para escapar.
Llega uno de los empleados de seguridad al blindado y baja con las sacas repletas hacia el banco. En ese momento, los delincuentes van sobre el empleado, lo reducen, le sacan el arma, el dinero y salen corriendo. La acción, no dura más de 12 segundos y el atraco parecía ser perfecto. Sin embargo, lo que parecía ser planificado por un grupo de expertos, en verdad no fue para nada así : dejaron todas las huellas que pudieron para ser encontrados.
Las cámaras de seguridad de los locales de la cuadra del banco, captaron todos y cada uno de los movimientos de los delincuentes desde que salieron corriendo hasta que llegaron a una vivienda para esconderse. Jamás se avivaron del pequeño pero implacable detalle que los llevó tras las rejas.
Los delincuentes fueron identificados como: Luis Carrizo, Sebastián Aleón , Juan José Antonio Scarcella y los hermanos Marcos y Walter Sosa.
DE LA CASA DE PAPEL AL PAPELÓN
Según las primeras versiones de la investigación, uno de los hermanos Sosa planificó el robo con una inspiración: era fanático de la Casa de Papel. Sin las máscaras de Dalí o los trajes rojos pero con la planificación del profesor y la promesa de no volver a verse luego del objetivo cumplido, la banda pergeñó lo que pudo haber sido el robo perfecto: sin víctimas fatales, en menos de 12 segundos y con un botín millonario. Sin el ingenio del Profesor, la banda del camión blindado espera en prisión el juicio oral por el delito de robo agravado por el uso de arma y portación de arma de fuego que tiene una condena mínima de 6 años y ocho meses de prisión.
"..." es la quinta entrega de “Robos de Película”, el segmento de Mauro Szeta que relata los robos más espectaculares que se hayan visto en la Argentina
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