Hay tres provincias afectadas por la ceniza y suspenderían elecciones

"No es momento de hablar de las elecciones sino del problema". El gobernador de Neuquén, Jorge Sapag , se refirió así a la eventual postergación de las elecciones generales del domingo debido a la nube de cenizas del volcán chileno Calbuco, que cubrió casi por completo el territorio de la provincia.

Durante una recorrida por San Martín de los Andes, el mandatario dijo al diario Río Negro que "si bien los vulcanólogos dicen que puede haber otra erupción, no saben si será dentro de una hora o de 100 años".

"Yo me manejo con realidades, no con hipótesis. La realidad es que en este momento el volcán no está emitiendo ceniza", sostuvo.

La provincia de Neuquén se vio sorprendida ayer por la mañana por una nube de cenizas que la cubrió casi por completo y alteró el cierre de la campaña electoral. En pocas horas, la provincia quedó semiparalizada: cerraron el aeropuerto, las rutas y las escuelas públicas y privadas; y los principales candidatos a gobernador suspendieron sus cierres de campaña.

"El viento está corriendo hacia el norte; Bariloche ya está claro, Villa La Angostura, Junín y San Martín de los Andes también", explicó.

"Si la situación cambia, volvemos a hablar. Ahora estamos trabajando para asistir a la población y pedimos tranquilidad", añadió.

En diálogo con el diario La Mañana, el gobernador explicó que la realización de las elecciones se evaluará hoy. "Vamos a esperar cómo se comporta el viento y el volcán", dijo. "No se va a tomar ninguna decisión en contra de la gente y se hará en base a cómo vayan aconteciendo los hechos", agregó.

Servicios afectados

En Bariloche, San Martín de los Andes, Villa La Angostura y Neuquén se suspendieron todos los vuelos, las clases y la actividad administrativa provincial. La ruta 40 está intransitable y la 237 fue cortada a la altura de Piedra del Aguila. Además, por la tarde, se cerraron los pasos fronterizos.

Por acción del viento, las cenizas llegarían durante la tarde de hoy a la ciudad de Buenos Aires. 

Los hospitales de las localidades cordilleranas de ambas provincias funcionan sólo para casos de emergencia. Las calles permanecieron vacías y la mayor parte de la población tuvo que refugiarse en su casa con el ánimo bajo. Los comercios del centro estuvieron cerrados en su mayor porcentaje. Sólo los supermercados se colmaron de gente muy ansiosa por comprar agua mineral, velas y comida no perecedera.

En la situación de emergencia, no faltó quien busque sacar ventaja. Vecinos de Bariloche denunciaron abusos en los precios de productos de extrema necesidad como barbijos, que se llegaron a vender hasta 55 pesos.
(Con información de agencias Télam y DyN)