La Presidenta contra Europa por la actitud frente a los refugiados

Cristina Fernández apuntó ayer contra Europa por el conflicto suscitado por los refugiados de Medio Oriente, al manifestar que “no” quiere emular “a países que dejan morir chicos en las playas” y criticar que “se andan tirando migrantes de un país a otro”.

“Por favor, que nadie nos venga a poner de ejemplo a algunos países del Norte, por favor, yo no quiero parecerme a países que expulsan inmigrantes y dejan morir chicos en las playas. No, eso no es de cristianos”, exclamó la mandataria, visiblemente emocionada, al aludir a la foto que recorrió el mundo con el cuerpo sin vida en la arena del niño sirio de tres años Aylan Kurdi.

En esa misma línea, la Jefa del Estado cuestionó que “andan tirando los migrantes de un país a otro como si fueran bultos. Nosotros, país de inmigrantes, país que hemos recibido, nuestros abuelos bajaron todos de los barcos, somos un ejemplo”, al encabezar ayer por la tarde un acto en la localidad bonaerense de José C. Paz, acompañada por el ex presidente de Brasil Luiz Inácio Lula da Silva y el candidato presidencial de FpV, Daniel Scioli.

Sin nombrarla, la mandataria apuntó también contra la canciller alemana Angela Merkel, al señalar: “No quiero parecerme a nadie que le dice a una piba de 15 años que no se puede quedar en el país a estudiar”, en alusión a un sonado acto en el que la dirigente hizo llorar a una niña palestina que, llegada desde el Líbano en 2011, le pedía quedarse en Rostock para estudiar.

“No quiero parecerme a los que dejan que se muera gente en las bodegas de los barcos, no quiero parecerme a los que crean un muro a lo largo de su frontera para que no pasen los otros de al lado, que son los que sostienen el trabajo y la producción de un país”, insistió la mandataria.

En ese sentido, destacó que “yo quiero ser como somos nosotros, solidarios, trabajadores, jugados por la producción, por la industria, el crecimiento y el desarrollo. Esos son los grupos de países con que tenemos que identificarnos y de los cuales tenemos que ser parte. Por ahí está el futuro, lo otro es solamente la degradación de la condición humana”.

“Cómo que no estamos contribuyendo al crecimiento mundial, cómo se crece, a ver que me expliquen, ¿excluyendo gente? ¿Cómo se crece, dejando morir gente en el mar? ¿Cómo se crece, hacinando gente en campos de refugiados? ¿O se crece dando trabajo? Porque la pregunta que nadie le ha hecho todavía a los que se la tienen que hacer es por qué se van de sus países, porque no tienen posibilidades o porque hay guerra”, reflexionó.

Finalmente, la Presidenta se preguntó: “¿Y las guerras en esos países quién las arma, quiénes las sostienen, quiénes les venden armas, a quiénes les convienen? Ahí hay que preguntar, para que no nos tomen de pavotes, que no somos pavotes”.