Empleada de "fast food" se quedó ocho horas encerrada en una heladera y escribió con ketchup para pedir ayuda

Una empleada de Subway que se quedó atrapada en un congelador de la empresa escribió mensajes de ayuda con ketchup en un intento desesperado de ser rescatada.

Karlee Daubeney, de 20 años, cubría el turno de 18 a medianoche en el local de la ciudad inglesa de Gloucester. Unos 45 minutos antes de su salida, entró a esa heladera para guardar la leche y se le cerró la puerta.

La joven quedó atrapada allí toda la noche hasta que fue rescatada a las 7.30 del día siguiente, cuando el resto de los empelados llegaron para abrir el local.

"Al principio estaba en estado de pánico, buscando algo con lo que poder abrir la puerta", contó la empleada, según informó la publicación local "Gloucester Citizen".

"Trataba de escribir ´ayuda´ en pedazos de cartón para pasarlos por debajo de la puerta. Creo que fue con ketchup o mayonesa", detalló Karlee.

La trabajadora sólo vestía la remera de la empresa y calzas. "Llegó un momento en el que estaba tan fría que no tenía la energía suficiente para golpear la puerta", relató.

Luego de ese incidente, Daubeney empezó a sufrir las consecuencias: "Mis músculos se enfriaron tanto que me resultó muy difícil caminar por unos días; tuve migrañas y se me secó la piel. Cuando fui al hospital al día siguiente me dijeron que estaba cerca de tener hipotermia".

Además, aseguró que se pone nerviosa si la puerta de una habitación se cierra. "No salí de casa durante mucho tiempo porque sufrí ataques de pánico realmente intensos, pasó casi un año y aún sufro de ansiedad", añadió.

Estaba previsto que el responsable del local comparezca el lunes ante el juez, acusado por delitos contra la salud y la seguridad, de los que fue declarado no culpable en la vista preliminar del pasado 26 de octubre.