Tal vez fue en esa noche en Brasil que comenzó a gestarse la épica de La Scaloneta. La Selección Argentina había llegado a las semifinales de la Copa América ante Colombia sin convencer del todo pero mostrando un crecimiento sostenido. Aquel equipo que arrancaba los partidos arrasando a sus rivales y terminaba sufriendo, debió definir el pase a la final en la serie de penales. Ahora era el momento de la verdad y para imponerse debía sacar un plus de dónde fuera.
Las rivalidades potencian al equipo de Lionel Scaloni, eso quedó claro en la Copa del Mundo. Desde el partido con Polonia y el enfrentamiento con Robert Lewandowski, también en aquel inolvidable cruce contra Países Bajos y en la sufrida final ante Francia. Pero la primera gran batalla de este plantel fue ese 7 de julio del 2021 en el estadio Mané Garrincha de Brasilia.
Se vivieron muchas emociones a lo largo de los 90 minutos en un partido que parecía que Argentina podría ganarlo con comodidad, por la rápida aparición de Lautaro Martínez para poner las cosas 1 a 0 antes del primer cuarto de hora. Pero luego, el conjunto cafetero equilibró el juego y en el segundo tiempo igualó el marcador.
Con ambos equipos jugados al ataque hubo chances muy claras para los dos lados, pero finalmente el pitazo del árbitro decretó que el encuentro sería sentenciado por los penales.
Una jugada muy clara desperdiciada entre Ángel Di María y Lautaro Martínez, a 20 minutos del cierre, dejó en el ambiente la sensación de que se vendría una nueva frustración para el equipo argentino, que arrastraba el dolor por las tres finales perdidas. Justamente sobre eso insistieron los jugadores colombianos, tratando de golpear la moral de Messi y compañía.
Al recordar ese duelo en una serie de Amazon Prime, el "Dibu" Emiliano Martínez mencionó que fue en el entretiempo de aquel partido que los jugadores de La Scaloneta comenzaron a masticar la bronca que les daría la fuerza para no dejarse caer en la definición.
"En el entretiempo, los jugadores colombianos nos habían dicho éramos pecho frío y perdíamos finales", contó Dibu, que había tenido una muy buena actuación en el partido tapando varias oportunidades claras. Pero en los penales mostraría todo su talento y su inquebrantable solidez mental.
Comenzó la definición y anotaron Cuadrado y Messi. Iban 1 a 1 y el Dibu puso en marcha su plan, sostenido en la furia ocasionada por aquellas cargadas. Davinson Sánchez debía ejecutar y el arquero le advirtió: "Mirá que te como hermano". Dicho y hecho: atajadón del 23.
De Paul erró su tiro y nuevamente La Selección necesitó del Dibu. Y justo el encargado de patear era Yerry Mina, el que más había hablado, al que el Dibu más rencor le guardaba. El marplatense reveló también que se lo tomó "muy personal" y ese fue el motivo por el que quería eliminar al conjunto cafetero "a como dé lugar".
Nuevamente respondió con otro "Mirá que te como", que retumbó en el estadio y fue seguido por una gran tapada. El resto es historia conocida anotaron Paredes, Borja y Lautaro Martínez y el Dibu contuvo el remate de Cardona para conseguir la mítica clasificación a la final, ante Brasil, en el Maracaná.
Fue la primera de muchas veladas épicas de un equipo que derribó todos los fantasmas del pasado y cambió para siempre la historia de la camiseta celeste y blanca.
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