Las estafas virtuales también llegaron a las aplicaciones de citas. Leonel chateó supuestamente con una chica y, por pedido de ella, le mandó algunas fotos desnudo. La trampa fue hacerle creer que se trataba de una menor de edad y que por eso terminaría preso. Así le robaron 700 mil pesos.
Primero le escribió alguien diciéndole que era la madre de la supuesta chica, que en su perfil se presentaba como de 23 años. “¡Cómo le mandás esas fotos a mi hija que es menor de edad¡”, le reprochó.
Leonel creyó que era una broma, pero más tarde lo llamó un hombre que se presentó como comisario. Le aseguró que en su despacho estaba la madre de una chica denunciando un abuso sexual contra su hija.
De fondo se escuchaban sirenas, conversaciones por handy y alguien escribiendo con un teclado. Incluso diálogos en lo que se hablaba de allanamientos. Todo simulaba ser una comisaría.
Y Leonel cayó en la trampa. Mucho más cuando le dijeron su nombre completo y su dirección. “Estamos yendo a tu casa con un patrullero”, le aseguró el “comisario”.
Después le aclaró que podían frenar todo si le transfería 200 mil pesos. Del susto que tenía, Leonel lo hizo.
El tema es que no quedó ahí. El siguiente paso fue decirle que estaba el abogado de la familia y que quería la misma cantidad o seguiría adelante con la denuncia. Leonel accedió.
“Tenemos que borrar todas las fotos de su celular para que no queden en la causa”, fue la nueva estrategia para sacarle más plata. Y le sacaron 100 mil más.
Pero tampoco terminó ahí la estafa. Ahora el que lo llamó fue “el juez”. Quería sus 200 mil pesos también. “Si no, yo sigo con la causa”, lo amenazó. Y los tuvo.
En total le robaron 700 mil pesos a Leonel. Recién cuando llamó al 911 para contar lo que le estaba pasando se dio cuenta de que todo era un gran cuento. Y lo que es peor. Una gran estafa.
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