Portada  |  24 noviembre 2021

"Papá mató a mamá": 227 femicidios en lo que va de 2021

Maite, Lucas y Sofía perdieron a sus mamás. Fueron asesinadas por sus padres. Desde el momento que ocurrió, sus vidas cambiaron para siempre. Hoy nos cuentan cómo es vivir sabiendo que son hijos de un femicida.

Informes Especiales

Maite y Lucas son hijos de Claudia Salgan, quien el 8 de julio de 2015 fue golpeada y apuñalada con un destornillador por quien era su marido y padre de sus hijos, Marcelo Núñez, un empleado metalúrgico y practicante de artes marciales.

Sofía es hija de Cristina “Beba” Rodríguez y de Hugo Ibarra, a quien ella ya no llama papá porque le robó a su madre, la asesinó a sangre fría de un disparo en la cabeza durante la fiesta de 15 de una nieta. Desde ese 18 de mayo de 2019, Sofía ya no es la misma y ya nunca lo será, ya no considera persona a su padre, lo llama Hugo, nunca más "papá".

A estos tres jóvenes los une una misma desgracia, pero a pesar de que sus papás asesinaron a sus mamás, ellos lograron seguir adelante, debieron reordenar sus vidas en función del eterno trauma de saberse hijos de un padre asesino.

Maite, Lucas y Sofia son huérfanos del femicidio porque por el asesinato de sus mamás se quedaron sin nada, se vieron obligados a andar solos y desde lo profundo de esa vivencia, nos entregan sus testimonios para que otros hijos se sientan menos desamparados y encuentren sus caminos, a pesar de sus padres femicidas.

Tanto Marcelo Núñez como Hugo Ibarra fueron condenados a cadena perpetua.

Comentarios