El grupo religioso Templo Satánico rrealizó un acto el domingo a las 23.30, en un edificio industrial junto al río Detroit, para disrutar "una noche de caos, ruido y libertinaje".
Allí presentaron la escultura de bronce, que pesa unos 1.500 kilos, mide 2.59 metros de alto, y tiene el torso de un hombre musculoso, las patas y la cabeza de chivo, con barbas, cuernos y alas.
Es la escultura del ídolo pagano Baphomet, flanqueado por un niño y una niña. Luce un pentagrama en la frente, un báculo de Asclepio en el vientre, un antiguo símbolo asociado con el dios griego del mismo nombre y con la curación de enfermos mediante medicina, y señala el cielo con los dedos índice y corazón de la mano derecha.
A la ceremonia sólo pudieron asistir mayores de 18 años. Debieron adquirir las entradas y se les comunicó la fecha y el lugar por correo. "Ven a bailar con el diablo y experimenta la Historia mientras se escribe", invitaban los organizadores a través de su página de internet, según reportó BBC Mundo.
El acto se llevó a cabo en secreto "para reducir el hostigamiento", según declaró el cofundador de la organización, Lucien Greaves.
El grupo religioso busca colocar la escultura en un jardín cercano al Capitolio estatal de Oklahoma, cerca del obelisco de los Diez Mandamientos instalado en el lugar en 2012. Hasta el momento no lo logró por varios planteos sobre inconstitucionalidad y el tema aún está en la Justicia.
Templo Satánico es una organización con matriz en Nueva York pero con representación en varios puntos del país. Reivindica a Satán, pero no lo hace por considerarlo un ser diabólico, sino "símbolo de la naturaleza inherente del hombre, la representación del eterno rebelde, de la libertad individual, más que una deidad o un ser sobrenatural", según explica en su sitio web.
"La misión del Templo Satánico es alentar la benevolencia y la empatía entre la gente. Además, abrazamos el sentido común y el de la justicia", aseguran.
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