El accidente ocurrió en la noche del 2 de octubre de 2010, cuando los senegaleses Mohamadou Dassi Gueye y David Diatta se dirigían hacia el pueblo de Capilla, en Badajoz, España.
En plena oscuridad, los hombres se guiaron por el GPS que les indicaba seguir el camino por el tramo de la ruta local EX-323 y no lograron ver el único cartel que indicaba la prohibición del paso. Así fue como 20 metros más adelante de la señalización cayeron al embalse de La Serena.
Diatta consiguió salir a nado, mientras Dassi -de 35 años- murió ahogado. "Lo hallaron a unos ocho o diez metros de la orilla", estableció la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Extremadura.
Un equipo de buceo de la Cruz Roja con ayuda de gente del lugar encontró el cuerpo "hundido en el agua a unos tres metros de profundidad y en posición fetal", añadió el fallo.
"La calzada por la que circulaba el vehículo estaba sin señalizar y eso fue la causa del accidente, ya que conducía directamente hacia el embalse", determinó el Tribunal.
Los jueces, que ya condenaron en marzo a Extremadrua a indemnizar con 2.000 euros a Diatta, ahora sentenciaron al gobierno regional a pagarle 271.233,12 euros a los familiares de Dassi Gueye por "la mala señalización de la vía".
Inaugurado por Juan Carlos I en 1990, el antiguo trazado de la EX-323 se pierde bajo el embalse de La Serena e inunda cerca de 14.000 hectáreas de terreno, según informó el diario El País.
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