Joseph Williams sin mandíbula nació sin mandíbula por culpa de un raro trastorno congénito del síndrome otofacial causado por un gen mutado.
Desde chico, debió alimentarse a través de un tubo y comunicarse mediante lenguaje de señas.
Si bien fue alcanzando varios obstáculos y logrando superarse, él siempre sintió que le faltaba algo: el amor.
A los 41 años, cuando ya casi se había dado por vencido por el sentimiento de inseguridad, conoció a Vania.
"Éramos amigos al principio, pero eventualmente comenzamos a salir y nos enamoramos", contó Joseph, quien admitió: "Estoy seguro de que la gente nunca hubiera esperado que me casara. Para ser honesto, yo tampoco pensé que lo haría".
Respecto a la baja autoestima que lo dominaba, Williams afirmó que ello le dificultaba tener citas, hasta que reflexionó logró superarla.
"Entiendo que soy diferente y que algunas personas pensarán que soy feo y no me aceptarán, pero sigo siendo una persona que tiene corazón, sentimientos y cerebro", sostuvo el hombre.
Y agregó: "Nacer sin mandíbula me ha dado una perspectiva diferente de la vida y me ha convertido en quien soy hoy".
Joseph, que recibe gran cantidad de elogios en redes sociales donde se viralizó su historia, afirmó que su próximo objetivo es convertirse en DJ.
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