Política
"Cuervo" Larroque dijo que el Conurbano "no da más" y reclamó el Salario Básico Universal
El ministro de Desarrollo de la Comunidad bonaerense, Andrés "Cuervo" Larroque, lanzó hoy una dura advertencia sobre la situación del conurbano bonaerense, al sostener que "no da más".
"No da más y solo le damos aspirinas y ponemos curitas. Necesitamos que el cirujano opere con celeridad", resaltó el funcionario provincial.
El también dirigente de La Cámpora y hombre de confianza de Cristina Kirchner, en ese sentido, volcó la responsabilidad sobre el Ejecutivo.
"El Estado bonaerense hace el esfuerzo, pero las políticas macroeconómicas las define el Gobierno nacional", manifestó Larroque y señaló que eso "condiciona mucho la situación" en esa zona de la Provincia, el Gran Buenos Aires.
"Hoy no hay una política estable y formal que pueda resolver esta situación estructural del conurbano", afirmó.
Larroque también se metió en el debate sobre cuáles deberían ser las ayudas del Estado a los sectores más empobrecidos.
"En su momento, tuvimos la política revolucionaria de la Asignación Universal por Hijo (AUH). Hoy hay un nivel de crisis que requiere una política de ingresos que quizá deba ser transitoria, pero que nos permita llegar a una recuperación del salario o a una recuperación del empleo como la que nosotros aspiramos", marcó.
Al respecto, pidió por la aprobación del Salario Básico Universal, actualmente denegado por el Ejecutivo Nacional y una de las banderas del kirchnerismo duro.
Esta medida fue presentada por diputados del Frente Patria Grande ligados a Juan Grabois, también líder del Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE), que pretenden adjudicar un ingreso mensual de $14 mil destinado a cerca de 9 millones de personas de sectores sociales vulnerables.
Tras la asunción de Silvina Batakis, exigió que el Ministerio de Economía se involucre en la aplicación de políticas sociales y que la discontinuidad del IFE agravó la situación.
Además, cuestionó –en línea con los dichos de Cristina sobre "dejar de tercerizar los planes"– el funcionamiento de los programas sociales dependientes del Ministerio de Desarrollo Social y apuntó contra el Movimiento Evita, organización que disputa territorialidad con La Cámpora.
"El verdadero ministro de Desarrollo Social es Emilio Pérsico (del Movimiento Evita). Daniel Arroyo se fue por eso, porque el que lo maneja es Pérsico, que habla directamente con el presidente", sostuvo.
Según Larroque, hay una discrecionalidad en la administración de esa asistencia social por parte de las organizaciones: "Es un problema gravísimo y ocurre porque el Movimiento Evita hizo un acuerdo con Macri apenas llegó a la presidencia: el Estado le entregaba la administración de los planes, de todo ese presupuesto, a cambio de una paz social".
En paralelo, defendió a la vicepresidenta en este enfrentamiento, que a finales de junio en un acto en la CTA había dejado en claro su postura de que "el Estado retome el control" y reduzca los planes en los que intermedian las organizaciones sociales oficialistas como el Movimiento Evita, Somos Barrios de Pie y la Corriente Clasista Combativa –entre otros– y movimientos piqueteros de izquierda, lo que en su momento abrió un fuerte debate político en la Argentina.
"En su disputa histórica con Cristina, y en la ignorancia o mala fe de Alberto de dejarlos hacer, el Movimiento Evita encontró un mecanismo para intentar disputarle poder a Cristina, con quien tienen un problema de muchos años", subrayó.
Y concluyó: "Negar al Estado en esta discusión es una locura. Hay que salir de esta trampa. El Estado nunca puede perder la centralidad, como está ocurriendo ahora".