El presidente Alberto Fernández regresó en la tarde de este jueves al país tras su visita relámpago a Uruguay, donde almorzó con su par Luis Lacalle Pou.
Estaba previsto que el jefe de Estado argentino le tome juramento al flamante ministro de Desarrollo Territorial y Hábitat, Jorge Ferraresi.
Luego del segundo hisopado negativo y tras recibir el alta que concluyó su aislamiento preventivo por contacto estrecho con un contagiado de coronavirus, Fernández viajó en forma sorpresiva a la residencia presidencial uruguaya de Parque Anchorena.
Allí mantuvo un almuerzo de trabajo en el que compartió un asado que hizo el propio Lacalle Pou.
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"Fue una muy buena reunión. Pudimos hablar distendidos sobre los problemas de la región en general y de Argentina y Uruguay en particular", sostuvo el mandatario argentino.
Además, señaló: "Los dos sentimos que debemos hacer mucho más profundo el vínculo y la relación de nuestros pueblos. También creemos que hay que trabajar juntos para que la región vuelva a unirse, respetando la diversidad ideológica y haciéndonos fuertes en un mundo que se globaliza. Estamos convencidos que juntos podemos aportar mucho a este objetivo".
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