El "territorio de los zombies" como muchos solían llamar a esta parte del conurbano bonaerense está pasando por un lento pero importantísimo cambio. Desde hace dos años Provincia, Municipio y gente de la Iglesia se pusieron a trabajar y el barrio logró mejoras hasta hace unos años, impensadas.
Telefe Noticias entró a Puerta de Hierro hace 4 años y mostró una realidad que no dejaba lugar a la esperanza. Sus habitantes estaban solos, sin ayuda, rodeados de marginalidad y espanto.
Pero hace dos años, frente a una emergencia total, fueron los curas villeros quienes se organizaron y junto al Estado Provincial y el Municipio cumplieron un verdadero "milagro": trabajar juntos para poder empezar a solucionar la problemática de un barrio tomado por los narcos.
Para que esto pudiera ser posible se necesitó de la voluntad y las agallas del al padre Nicolás Angelotti, conocido como el padre "Tano" quien se metió en el verdadero infierno para poder luchar contra el mundo narco. Su obra recién comienza y lo más importante es que junto a las autoridades lograron correr a "los transas" para poder limpiar la zona e instalar un centro de ayuda para adictos que es una luz entre tanta oscuridad.
En Puerta de Hierro unos 200 jóvenes fueron rescatados del paco. Ahora viven en un hogar de la Iglesia y ayudan a otros que aún no logran salir de la adicción.
Matías, cuenta que es la primera vez que dura tanto en un trabajo. Es el responsable del proyecto de urbanización del barrio. Junto con sus 24 compañeros trabajan para llevar a cabo el playón deportivo, la plaza seca, las luminarias y los asfaltos.
Fabián es parte de la cuadrilla que con 8 obreros están a cargo de las obras de cloacas, “las cañerías no dan más, el agua es un problema muy grande en el barrio, los chicos están contaminados, tienen granos.” Todavía falta y el proyecto es bastante grande, pero todos los días se logra afianzar un paso más en la tan ansiada urbanización.
En la nueva Puerta de Hierro los chicos pueden salir a jugar, tienen un club donde hacen deportes, reciben becas y acompañamiento para terminar sus estudios, algunos ya están empezando con la facultad y serán los primeros universitarios de puerta de hierro y el orgullo del barrio y de su familia. El esfuerzo es mucho, pero la luz comenzó a brillar un poco para ellos.
En este lugar que recuperó la vida, también hay un grupo de trabajadores que toda su vida se dedicaron a coser zapatos, son reparadores. Al darse cuenta que contaban con esa posibilidad se organizaron y hoy están llevando adelante un nuevo proyecto para diseñar, confeccionar y vender zapatos y zapatillas. ¿La marca? P.H. (Puerta de Hierro), de esta forma podrán dar más trabajo adentro del barrio y vender el producto terminado para lograr un sueldo más digno. Desde chatitas, hasta zapatillas, pasando por stilettos y botas, todos los modelos de P.H. están íntegramente realizados por gente del barrio que quiere que ese lugar deje de ser el barrio más peligroso del conurbano, que apuesta a tener un futuro distinto y que sueñan con ser reconocidos por esta marca y no por el paco.
Donde había "bunkers" hoy hay una salita de salud y van por más. La idea es no bajar los brazos, seguir trabajando y hacer de esta parte de La Matanza un ejemplo de que el trabajo en conjunto y los recursos bien empleados salvan vidas.
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