Avellaneda: denuncian que la municipalidad les tapió la casa con ellos adentro y no pudieron salir

"En un primer momento nos avisaron que iban a hacer un pasillo y después, de un momento a otro, golpearon la puerta e impusieron el cerramiento", Lucas todavía está sorprendido de lo que sucedió en su vivienda. Una obra municipal le tapió la puerta y ventanas de su casa y de un momento al otro quedó encerrado sin poder salir de su propiedad. "No entra aire, no tengo ni una ventana", denunció.

Las autoridades del municipio de Avellaneda llegaron a su vivienda para hacer una reforma en el contexto de una serie de obras que están realizando para mejorar la zona y construir plazas en la localidad de Sarandí y al llegar a la casa levantaron una pared que la dejó tapiada. 

Según contó la familia, los obreros llegaron este martes acompañados por policías a la vivienda ubicada en la intersección de las calles Casella Piñero y Mujeres Argentinas. Comenzaron a trabajar prometiendo no afectar a la propiedad, pero inesperadamente levantaron una pared que les cortó el acceso a la calle.

"En un primer momento nos avisaron que iban a hacer un pasillo y después, de un momento a otro, golpearon la puerta e impusieron el cerramiento", afirmó el joven que pasó 30 horas encerrado sin poder salir.

"De repente dijeron no, hay que hacer lo que hay que hacer y ya. Yo les pedí primero que hagan el pasillo por dentro pero evidentemente me mintieron", dijo el hombre que reclama poder tener una salida. "No pido nada de otro mundo, solo recuperar lo que tenía, por lo menos una ventana, una entrada de aire. Tengo prendido el ventilador porque acá no circula aire", sostuvo.

"Mintieron y nosotros no podemos convivir compartiendo una misma salida. El pasillo era un punto intermedio que les servía a todos”, explicó.

UNA "SOLUCIÓN" INSÓLITA QUE EMPEORÓ LAS COSAS

La manera de resolver el conflicto que encontraron las autoridades, fue instalar un caño dentro de la pared para que sirva de ventilación. "Se siente el olor a encierro, tengo una nena de un año y mi mamá sufre ataques de epilepsia, mi cuñada tiene un hijo discapacitado, no se puede vivir así", cuestionó Lucas.

Además, tuvieron que lidiar con los malos tratos por parte de la Policía. "Nos dijeron que no era problema suyo cuando mis familiares les advirtieron de estas situaciones. No les importó".

UNA CONSTRUCCIÓN QUE NO ESTABA AUTORIZADA Y TRES FAMILIAS ENCERRADAS

Como suele suceder en muchos casos, ante la falta de dinero, la familia había dividido la vivienda y así tanto la madre del joven, su hermana y Lucas viven en casas contiguas dentro del mismo terreno y cada una tenía su propia salida. Para poder acceder a una salida, debieron derribar la división que habían hecho y las tres casas ahora volvieron a ser una sola.

“No estaba autorizado a hacer las puertas que daban a la vereda, pero las tenia hechas desde hace un tiempo, vivo acá desde el 2005″, contó. “Nunca tuve problemas, pero ahora que lo arreglaron, los caños de las casas no funcionan. No tenemos desagües”, lamentó el hombre.

En el lugar viven doce personas que ahora comparten una misma salida. "Tuve que abrir una pared para salir y llevar a las chicas al colegio", explicó Lucas y señaló: "Van a mejorar el espacio público a costa de empeorar nuestra calidad de vida".