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Detuvieron al femicida que mató a su ex mujer de 17 puñaladas en Castelar

Christian Gustavo Hallu fue capturado en la vía pública por policía de Santa Teresita. Está acusado de asesinar a Cintia Verónica Laudonio en su domicilio delante de sus tres hijos.
Por Telefe Noticias

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La policía de Santa Teresita detuvo en las últimas horas a Christian Gustavo Hallu, el hombre que mató a su ex mujer de 17 puñaladas delante de sus hijos en su casa de Castelar.

Según informaron fuentes cercanas de esa dependencia a Telefe Noticias, el femicida fue detenido en la vía pública, tras una investigación en conjunto con la comisaría de Castelar.

La detención se produjo en la calle Rioja al 400 de Mar de Ajo, indicaron las fuentes policiales a este medio. Además informaron que ya se dio comunicación a la fiscalía de intervención en Castelar, que “avaló todo lo actuado”.

En tanto precisaron que se notificará al detenido de la formación de la causa de “femicidio/homicidio agravado”. Asimismo señalaron que enviarán una comisión policial de Castelar a la comisaría de Santa Teresita para efectuar el traslado del detenido.

Cintia Verónica Laudonio recibió 17 puñaladas enfrente de sus hijos de 3, 8 y 10 años. Tras cometer el asesinado el hombre huyó del lugar. El cuñado de la joven asesinada relató, en declaraciones televisivas, que anoche la hija mayor de Laudonio llamó a su abuelo y le dijo: "Vení que Cristian le está pegando a mamá".

"Me levanté, pedí un remis, y cuando llegué a la casa las nenas estaban paradas del otro lado de la reja y no hablaban, y yo preguntaba qué había pasado", relató.

El hombre detalló que una de las chicas "tenía manchas de sangre" en su ropa y que, cuando entró a la casa, encontró a la joven "tirada en el suelo". "Le levanté la cabeza vi que tenía cortado el cuello. Estaba agonizando. Ella me miró pero murió en el momento", afirmó.

Por su parte, la ex suegra de Laudonio, contó que el atacante "tenía restricción, denuncias", pero que "él la desafiaba" a su ex mujer y le "pinchaba los teléfonos". La mujer contó que una vez Hallu "se había metido en el cuarto y estuvo 6 o 7 horas debajo de la cama", esperando a su hija. Incluso, afirmó, "un día se presentó a un almuerzo familiar con un arma".