Que tus padres sean artistas, le puede pasar a muchas personas. Pero que tu papá y tu mamá sean Norman Briski y Nacha Guevara, dos de los artistas más importantes del país, no le pasa a todo el mundo.
Gastón Briski es diseñador de sonido, y como no pudo escaparle al destino, su infancia transcurrió entre escenarios y ensayos y allí empezó a maravillarse con el mundo que más tarde formaría parte de su profesión.
Sus papás se separaron cuando él tenía 2 años, vivió en casas diferentes y tuvo que exiliarse junto a su familia en la época de la dictadura argentina. Hoy, a veces, se topa con películas de su papá en la tele y se sorprende. Les agradece a ambos el esfuerzo por haberlo cuidado y resguardado de las situaciones difíciles que debieron enfrentar.
Comentarios