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Una mujer fue asesinada a puñaladas en La Matanza
La víctima fue identificada por la policía como Paula López de 27 años, quien residía junto a sus hijos de 2 y 10 años en una vivienda ubicada en Manzanares 2365, en la localidad del partido bonaerense de La Matanza, al sudoeste del conurbano.
Su agresor la golpeó, la degolló y le dio unas 26 puñaladas, según confirmaron los peritos forenses que realizaron la autopsia legal correspondiente.
En un desgarrador relato, la mujer que halló muerta a López dio detalles del momento en el que confirmó que su amiga, vecina y madrina de uno de sus hijos se encontraba ya sin vida, totalmente ensangrentada sobre una cama.
"Golpeé la puerta y no me atendió. Esperé unos minutos y vi que podía entrar. Fui al dormitorio, que tenía la luz apagada y el ventilador prendido. Prendí la luz y la encontré boca abajo con una almohada sobre la cabeza", dijo la testigo.
Y agregó: "Le hablé. No me contestó. Le saqué la almohada de arriba de la cabeza. No me contestó. No se movió ni nada. No la toqué. Salí afuera a los gritos. Vino una vecina a socorrerme y llamamos al 911".
En medio de una crisis de nervios, la mujer que encontró a la víctima logró comunicarse con el número policial para dar aviso y su marido, tras enterarse del caso, salió a buscar a los efectivos para que apresuraran su presencia.
Vecinos de la mujer asesinada contaron a la prensa que habían escuchado gritos y fuertes discusiones de López con un hombre, quien sería el padre de sus dos hijos menores, durante la tarde del sábado, hasta que a las 17:00 sólo hubo silencio.
Tras la llegada de la Policía, los efectivos hablaron con vecinos e iniciaron una pesquisa, por lo que momentos después lograron detener al exmarido de López y padre de los dos chicos, a los que se llevaba de paseo los fines de semana.
El hombre fue detenido y hasta ayer era el único sospechado de ser el autor material del crimen, dijeron los investigadores.
"Era mi comadre, mi amiga y confidente. Paula era una muy buena persona. Era una mujer que trabajadora que luchaba por sus hijos", contó la mujer que encontró a su ser querida en la casa en la que vivía desde hace dos años tras mudarse desde Laferrere.