Atacaron un helicóptero con autoridades que investigan presunto abuso de soldados en Colombia

El vehículo fue atacado con disparos de “armas de largo alcance” cuando se aproximaba al destino -la ciudad de Tierralta, en el departamento noroccidental Córdoba-, por lo que el piloto decidió cambiar el rumbo y aterrizar en una unidad militar en Carepa, en la vecina región de Antioquia, con todos sus pasajeros ilesos, según fuentes del Ejército citadas por el diario El Espectador.

El helicóptero transportaba a unos 20 funcionarios de la Fiscalía, la Procuraduría y la Defensoría del Pueblo que se dirigían a Tierralta para verificar denuncias según las cuales cuatro hombres armados, presumiblemente soldados, amenazaron a civiles, incluidos menores de edad y mujeres embarazadas, e incluso intentaron abusar de una mujer indígena.

Esos episodios fueron registrados en videos que se viralizaron hoy y en uno de ellos aparece una mujer con un bebé, que grita: “¿Por qué vienen a atropellarnos? ¿Les parece justo amenazarme con una pistola teniendo yo mi hijo en brazos? ¡Identifíquense!”, según la agencia de noticias AFP.

El dirigente humanitario local Orlando Triana sostuvo que los autores de las intimidaciones fueron militares que se hicieron pasar por miembros de los remanentes de las FARC que desconocieron el acuerdo de paz por el que se disolvió esa organización guerrillera en 2016.

La divulgación de los videos y las denuncias causó la indignación del presidente Gustavo Petro y el ministro de Defensa, Iván Velásquez, incluso antes de que se conociera el ataque al helicóptero.

“Volver al paramilitarismo y al despojo de tierras sería el peor error militar de la fuerza pública; esto no puede pasar en este gobierno, es el mismo Ejército quien debe presentar públicamente, al lado del gobierno, su propia investigación en estos hechos”, afirmó Petro en la red X (antes Twitter).

Velásquez, en el mismo medio, sostuvo que el incidente “es de suma gravedad y exige la adopción de drásticas decisiones”, y prometió que no habrá “ninguna tolerancia con comportamientos que no solo afectan a las comunidades sino a las propias Fuerzas Militares”.

“No se trata de ocultar la verdad; aquí quien haya incumplido las órdenes, quien haya propiciado una actuación indigna que se sale de nuestra doctrina militar, de nuestros principios y valores, de nuestros procedimientos, tendrá que asumir las consecuencias de su actuación”, dijo el comandante de las Fuerzas Militares, general Helder Giraldo, a la prensa.

Paralelamente, Velásquez y el ministro del Interior, Luis Velasco, anunciaron que viajarán mañana a Tierralta para instalar una mesa de diálogo con la comunidad, según la revista local Semana.

Mientras tanto, un juzgado de instrucción penal militar abrió esta tarde una investigación preliminar para establecer la presunta participación de efectivos del Ejército en los hechos denunciados y si incurrieron en “el delito de abuso de autoridad especial”, informó el Ejército en un comunicado.