Las imágenes aparecieron en la cuenta de Facebook de un sitio de videos británico y fueron reproducidas luego por otras cuentas en la misma red. Tuvo varios millones de reproducciones y un millón y medio más en YouTube. Por lo que se escucha, quien lo grabó es un brasileño.
Se puede ver cómo el crustáceo se desplaza pegado a la pared, también como un buen esgrimista en combate, y hasta parece atacar a quien lo va siguiendo con la cámara y con la evidente intención de recuperar el cuchillo.
En la pinza izquierda lleva el arma que parece haber robado de una cocina, y en los 35 segundos de video vemos que resiste cualquier intento de acercamiento de la persona que lo sigue.
No sabemos si finalmente fue sometido y el cangrejo terminó en alguna sabrosa casquinha de un restaurante brasileño.
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