Una joven llamó la atención en Instagram al compartir su historia y mostrar su increíble cambio tras bajar más de 80 kilos.
Alysha McNair es una joven de 21 años que llegó a pesar más de 170 kilos producto de su adicción a la comida, llegando a consumir el doble de las calorías que debe ingerir una mujer (2.000) en sólo una comida.
Así Alysha comenzó a ser acosada en la escuela, donde constantemente se burlaban de su peso y de su cuerpo.
Pero todo terminó cuando la joven de British Columbia, Canadá, se dio cuenta que si seguía de esa manera iba a morir, por lo que tomo conciencia y decidió cambiar por completo su estilo de vida.
Alysha abandonó la comida chatarra por completo y se inscribió en un gimnasio donde entrenó a diario. "Fui adicta a comer rápida y, a menudo, visitaba cinco restaurantes diferentes solo para completar una comida", reveló McNair a Mirror y agregó "Pero después de ahogarme un día con una bebida gaseosa a los 17 años y esforzarme por recuperar el aliento, me di cuenta de que era una muerte o un cambio".
Según contó Alysha cuando llegó a su peso máximo (171,4 kilos) se sentía tan avergonzada de su cuerpo que ni siquiera salía a la calle. "Pasé cuatro horas maquillándome para intentar sentirme mejor conmigo mismo, pero nada funcionó", contó. Tras el esfuerzo la joven logró perder más de 80 kilos. "Nunca me he sentido más increíble y ahora tengo un vestido de talla 14".
Cuando la joven se dio cuenta que estaba experimentando cambios en su cuerpo comenzó a documentarlo y compartirlo en redes sociales como una manera de inspirar a otros.
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