Economía
Despedir el año en un restaurante: la alternativa para no cocinar en las fiestas
En las fiestas de fin de año, algunas personas eligen celebrar en un restaurante. Los locales gastronómicos ofrecen diferentes alternativas.
La ciudad de Buenos Aires tiene muchísimas opciones para salir a comer y celebrar las fiestas sin preocuparse por cocinar. En pleno Puerto Madero, uno de los clásicos porteños para celebrar las fiestas es Puerto Cristal, con dos propuestas bien diferenciadas para Nochebuena y Año Nuevo. Con 300 cubiertos, 50 empleados y una carta internacional centrada en pescados y mariscos, el restaurante diseñó experiencias a medida de cada fecha: una cena familiar y tradicional para el 24, y una fiesta completa con show, baile y bebida libre para el 31.
La propuesta de Nochebuena apunta a una velada cálida, de mesa compartida y sabores clásicos. Las entradas incluyen rabas a la romana, gambas al ajillo, ensalada Puerto Cristal, provoleta y burrata. En los principales, se destacan pescados y carnes —trucha costera, lenguado en crema de puerros, abadejo, salmón rosado, ojo de bife grillado, lomo a la liguria y churrasquito de cerdo— además de dos opciones de pastas (lasaña verde y sorrentinos gratinados). Para el cierre, postres tradicionales y otros más festivos, como natillas madrileñas, brownie tibio con helado, tiramisú o helado de limón al champán. La bebida es libre, con vinos Catena Zapata, cerveza, gaseosas, aguas y café.
En Año Nuevo el foco cambia por completo: Puerto Cristal arma una noche más teatral, con luces, música, baile, cotillón y una cena de formato ceremonial. La experiencia inicia con una mesa fría con lechón braseado, jamón serrano, embutidos de bellota, quesos curados, lomo ahumado y vegetales de estación. Para quienes prefieren mariscos, está la opción con pulpo, langostinos, camarones, vieiras y mejillones. Los principales incluyen ojo de bife y cordero de campo al romero. El cierre llega con postres como Dulce Encuentro, Lemon Champ y cerezas frescas de estación. Todo acompañado por bebida libre, brindis y dulces navideños.
Para los más chicos, el menú infantil mantiene un formato simple: milanesa con papas o puré, pollo grillado o pastas, más opciones de postre como helado o flan. Tanto en Nochebuena como en Año Nuevo, el restaurante contempla opciones vegetarianas y celíacas, con circuitos de cocina independientes para evitar contaminación cruzada.
La demanda este año superó las expectativas: el 31 ya no tiene disponibilidad para mesas de dos, aunque quedan opciones para grupos grandes; y para el 24 aún hay lugares.
Las reservas requieren seña y Puerto Cristal ofrece devolución del 70% si se cancela con 96 horas de anticipación. Para turistas, el 31 se suma un transfer ida y vuelta al hotel.