Informes Especiales
Trabajos de vacaciones: terminaron las clases pero ellos no descansan
Ellos ya terminaron la cursada en el colegio pero no se van a quedar en casa ni irse de viaje. Ya sea por necesidad de la familia o para tener una plata extra ellos se siguen levantando temprano para salir a laburar.
Si hay un momento que ansían los estudiantes secundarios es el fin de clases. Pero, en un contexto económico difícil, no para todos significa tomarse un descanso. Hay muchos que aprovechan el verano para trabajar y ganarse unos pesos.
Ezequiel terminó hace una semana tercer año de la escuela secundaria. Al día siguiente empezó a trabajar por las mañanas en la verdulería de su madre, en Villa Adelina.
“Me gusta atender a la gente, hacer cuentas y, además, así tengo un ingreso para comprarme algunas cosas”, cuenta.
Ailen, de 15 años, también empezó su primer trabajo cuando terminaron las clases. Hace alisados y tratamientos capilares en su casa. Para eso un mes antes hizo un curso.
“No es que tengo todo el día ocupado y, además, me encanta hacerlo. Porque es mi vocación y me permite ganar unos pesos para mis gastos personales”, cuenta.
El caso de Agustín es más urgente. Como sus padres no están atravesando una buena situación económica, decidió trabajar en el lavadero de autos familiar.
“No es que estoy todo el día, pero con mi trabajo siento que ayudo a que las cosas estén mejor. Y eso es lo que me enorgullece”, dice.
